Ha llegado el día. Has conseguido una entrevista de trabajo con tu empresa soñada y no sabes cómo vestirte. Por si no fuera bastante con los nervios por el proceso de selección, ahora un problema más al que hacer frente. No te preocupes y revisa estos sencillos consejos que he recopilado para que lo tengas más fácil a la hora de diseñar tu look ideal para acudir a la entrevista. Sin duda serán tus cualidades las que deberán impresionar, pero un estilismo acertado puede ayudarte a ganar muchos puntos porque no nos vamos a engañar, la primera impresión siempre cuenta.
Algunas pautas generales
En primer lugar cabe reseñar que para el estilismo que se vaya a elegir, en algunas ocasiones deberá de tenerse en cuenta el tipo de trabajo al que se quiera optar. Para algunos puestos no hará falta ir con traje ni con falda formal, pero esto no quiere decir que se pueda aparecer en shorts. Hay que guardar un mínimo de formalidad y elegancia, logrando así transmitir una imagen de seguridad y responsabilidad muy acertada, que al fin y al cabo es lo que van a buscar principalmente las personas que te realicen esta entrevista.
Si la entrevista es para un puesto importante en alguna gran empresa sin duda deberás revisar sus códigos de vestimenta para intentar no salirte de ellos ni acudir demasiado informal. Ahora bien, vestir elegante o formal no quiere decir vestir incómoda. Elige siempre prendas con las que te sientas a gusto y puedas moverte bien, no tienes que ir disfrazada, sino parecer profesional y segura de ti misma.
Prendas principales
Con la máxima de que no debes ir disfrazada, a la hora de elegir las prendas principales para tu look tienes diferentes opciones. Si estás acostumbrada a utilizar pantalones y crees que llevando una falda vas a ir más insegura, no tienes por qué hacerlo. Algunas opciones interesantes con pantalones son básicos negros o unos clásicos de pinzas. Existen multitud de estilos de este tipo de prenda con un corte formal y elegante que podrás combinar, tanto con camisas como con blusas de tonos neutros. Elige una blusa bonita y elegante, ten cuidado de que no sea transparente y prepárate a triunfar.
Por otro lado, soportas bien las faldas y los vestidos y no te molestan las medias, puedes decantarte por este tipo de prendas. No existe ningún tipo de falda o de vestido exclusivamente diseñado para estas situaciones, simplemente deberás tener en cuenta elegir una falda de corte ejecutivo o traje y evitar del todo las que sean excesivamente cortas. Lo mismo con los vestidos y con los escotes de éstos. Hay mucho tiempo para utilizarlos y muchos eventos para los que son adecuados, no arruines tu entrevista eligiéndolos.
Otro punto clave es que olvides los coloridos. Elige colores neutros, básicos y clásicos. Puedes poner algo de color pero en poca cantidad, no elijas nunca jerseys fucsias o camisas amarillas brillantes para una entrevista de trabajo. Si seleccionas una americana, por mucho que se lleven las de colores, elige una de corte clásico en tonos sencillos. Para una entrevista de trabajo siempre menos es más.
Complementos con buen gusto
Los zapatos son una pieza clave en nuestros estilismos y por tanto también es muy importante elegirlos bien para la entrevista. En primer lugar, como te he explicado más arriba, lo principal es que vayas cómoda. No te pongas unos tacones con los que no puedas andar o lo que vas a conseguir es transmitir una imagen negativa. En cuanto al tipo de calzado, mejor si es cerrado. Por ejemplo unos salones negros serán una de las mejores elecciones, pero si este tipo de tacón no te es cómodo siempre puedes decantarte por unas cuñas cerradas o por otro tipo de zapato elegante con algo de plataforma, y por supuesto revisa que estén muy limpios antes de entrar a la entrevista. Si vas a combinarlos con faldas o con un elegante vestido, siempre debes llevar medias.
En cuanto a los complementos y las joyas: evítalas. Lo mejor será que te pongas sólo los pendientes y ya está, pero si te gusta añadir complementos a tus looks y no puedes evitarlo elige sólo un detalle más: una pulsera coqueta o un collar con estilo, por ejemplo. Si llevas piercings, quítatelos. Sí, estamos en el Siglo XXI, pero te guste o no van a valorar tu imagen personal, así que si quieres conseguir el trabajo, mejor que entres en la fase de selección con un look lo más neutro posible.
Maquillaje y peluquería
¿Y en cuanto al maquillaje? Pues una vez más, menos es más. Esto no quiere decir que tengas que ir a cara lavada, pero casi. Aplícate base, corrector, brillo… y todo lo que quieras, pero no te llenes de color ni te recargues. Es decir, utiliza todos los productos que necesites para corregir las ojeras y las imperfecciones que te guste retocar, pero que al final quede natural. No elijas maquillajes oscuros ni te apliques sombras. Como mucho algo de raya de ojos, un brillo de labios y algo de colorete. En cuanto a la colonia, lo mejor será que no te pongas un perfume muy fuerte, si quieres algo de colonia fresca.
En cuanto al pelo sucede como con el maquillaje. Menos siempre será más. Puedes utilizar recogidos o coletas elegantes, bien hechas pero muy básicas, o decantarte por el pelo suelto, pero no te hagas peinados de fiesta, rizos grandes ni nada llamativo. El pelo suelo y liso, o con tus ondas naturales, pero bien peinado es una muy buena opción. Como sea que esté cuidado, como con el maquillaje, pero que no parezca excesivamente trabajado.