¿Te acabas de comprometer pero no sabes ni cómo empezar a organizar los preparativos del gran día? Puedes respirar hondo y relajarte porque has llegado al lugar adecuado.
Es completamente normal no tener ni idea al principio y podemos incluso sentirnos un poco agobiados por la difícil tarea que nos aguarda. Pero no debes preocuparte ya que nadie nace sabiendo cómo planear una boda y, sin embargo, todas acaban saliendo maravillosamente bien. Y precisamente con la intención de ayudarte a que tú día especial salga redondo y sea perfecto en todos los sentidos hemos creado esta categoría.
Antes de nada queremos decirte que lo más importante a la hora de planificar tu boda es disfrutar del proceso y afrontarlo con una actitud positiva. Aunque puede llegar a ser bastante estresante en algunas ocasiones, nunca hay que olvidar que estamos preparando una celebración.
Para que todo salga bien es fundamental formar un buen equipo con tu pareja y dedicar unas cuentas horas previas a planearlo todo para evitar posibles discusiones o cambios de última hora. En efecto, saber organizarse dentro de la pareja es increíblemente práctico a la hora de organizar tu boda pues facilita enormemente la tarea y reduce al mínimo los momentos tensos y los agobios.
Consejos para empezar la organización de la boda
Lo primero en lo que debemos pensar es en el presupuesto ya que condicionará todos los demás aspectos de la ceremonia. Este es un tema muy personal aunque existen miles de páginas web que te estiman posibles presupuestos para que te puedas hacer una idea general acerca de los costes de cada servicio.
Definir una fecha, el número aproximado de invitados y el sitio en el que tendrá lugar el evento es el siguiente paso. Para esto último es importante tener claro si queremos que la boda sea en interior o exterior, cerca o lejos de casa, etc.
Si escogemos realizar la ceremonia al aire libre deberemos prestar atención a las posibilidades de que llueva o haga mal tiempo así como a la temperatura en general para prever la necesidad de incorporar una carpa, mobiliario, estufas portátiles, etc.
Buscar el vestido de novia perfecto es otra de las prioridades de la lista. No tengas prisa por encontrarlo ya que, actualmente, hay tantas opciones y modelos diferentes que podemos volvernos locas. Simplemente busca hasta que aparezca tu vestido ideal. Tranquila que siempre aparece uno. Más sencillo de conseguir, aunque igual de importante, es el traje del novio y todos los complementos y accesorios necesarios para darle el look perfecto para la ocasión.
Decisiones difíciles
Seleccionar a los proveedores que harán posible que nuestro gran día sea especial e inolvidable no es tarea fácil. Existe un gran número de empresas especializadas en bodas y eventos de este tipo y todas ofrecen una increíble variedad de servicios diferentes.
Es esencial tener muy claro lo que queremos que haya y lo que no en el día de nuestra boda y contratar esos servicios en función de nuestras prioridades ya que, en el caso contrario, acabaremos dejándonos un dineral en detalles y caprichos que realmente no nos hacen ninguna falta.
Hay una serie de servicios como el catering o la música que es mejor dejar en manos de un equipo de profesionales, pero existen otros muchos más opcionales cuya contratación o no dependerá exclusivamente de la idea de boda que tengamos en la cabeza, y del presupuesto por supuesto.
Una vez tengamos todos los servicios imprescindibles cubiertos y a los proveedores elegidos es el momento de planear la logística del evento y el programa de la boda.
Este es el punto más personal de la lista y el que hace que cada boda sea única y especial. Nosotros recomendamos contratar primero los proveedores y luego planificar el evento ya que, si lo hacemos al revés, corremos el riesgo de que los servicios disponibles no cuadren del todo con lo que teníamos en mente y nos toque reestructurar el plan.
Un último consejo antes de que te lances a esta maravillosa aventura: no tengas prisa por tenerlo todo preparado. Si te precipitas es más probable que te salgan mal las cosas y que te agobies. Ves paso a paso disfrutando de cada detalle, pues es un momento único que no se volverá a repetir jamás.