En la actualidad no hace falta disponer de un gran capital inicial para montar una empresa. Si dispones de una buena idea que pueda darte ingresos pronto es probable que puedas optar a diferentes tipos de préstamos para montar un negocio. A continuación te presentamos las diferentes opciones que existen para pedir un préstamo y montar una empresa.
Los préstamos sin nómina
Los préstamos sin nómina son una buena alternativa para los pensionistas, autónomos u otro tipo de personas que no tengan nómina y quieran invertir en un nuevo negocio. Ahora bien, para poder hacerlo es importante contar con alguna fuente de ingresos oficial regular y suficiente para poder conseguir el préstamo.
Los créditos personales
Por otro lado encontramos los créditos personales. Este tipo de créditos pueden ofrecerlos las entidades bancarias y también algunos prestamistas particulares como podemos ver en Crediting.es. Es una forma muy interesante de conseguir financiación para proyectos personales en los que tengamos confianza como por ejemplo un negocio novedoso.
Los micro créditos
En tercer lugar encontramos los micro créditos. Una alternativa que cada vez escogen más personas ya que te permite conseguir dinero rápidamente para poder empezar un negocio de forma eficiente si no necesitas mucho capital y además sabes que el retorno va a ser rápido u que vas a poder devolver el crédito de forma sencilla en los plazos establecidos. En la actualidad puedes encontrar plazos de amortización de hasta tres meses para hacer frente a estos gastos.
Las líneas de crédito
Por otro lado encontramos las líneas de crédito especialmente pensadas para emprendedores, pymes y autónomos, que son una buena opción para conseguir una cantidad de dinero concreta y poder disponer de ella teniendo en cuenta nuestros requerimientos. De esta forma tendremos el dinero disponible para irlo gastando según vayan surgiendo nuevas necesidades. Es una alternativa interesante para empezar en una empresa e ir contratando poco a poco más personal, equipos, etc.
Los préstamos para pymes y autónomos
Por otro lado encontramos los préstamos clásicos para emprendedores, para pymes y para autónomos. Son la mejor opción si sabes aproximadamente la cantidad fija que vas a necesitar para empezar con tu proyecto empresarial. Los bancos suelen ser los promotores de este tipo de préstamos. Sus ventajas son que los intereses suelen ser más bajos que los de otros préstamos, como por ejemplo los personales para consumo.
Préstamos con garantías hipotecarias
Encontramos también los préstamos con garantías hipotecarias. Son una buena alternativa si no tienes otro aval pero cuentas con una vivienda o un inmueble en propiedad ya que te servirá para conseguir hasta el cuarenta por ciento del valor de dicha vivienda o inmueble para conseguir alcanzar proyectos nuevos. Con estos préstamos no necesitarás justificar ningún tipo de ingreso porque el inmueble será suficiente como aval.
Los préstamos P2P
Por otro lado tenemos los préstamos P2P que son una buena alternativa para autónomos que se pueden logar mediante las plataformas de crowdlending. Estos préstamos no requieren de intervención bancaria ni de ningún otro tipo de entidad financiera. Es un espacio de reunión entre profesionales con capital y más profesionales con necesidad de financiación para su empresa y para sus proyectos e inversiones independientes.
Los créditos comerciales
Por otro lado encontramos los créditos comerciales o descuentos comerciales que no son otra cosa que una especie de aplazamiento que las empresas o proveedores conceden a sus clientes para que puedan empezar su negocio de forma eficiente y pagar a X días para poder vender los bienes comprados y responder al proveedor. El problema de este tipo de créditos es que necesitarás ganarte la confianza de las empresas o contar con algún aval o recomendación para poder conseguirlos.