El día de tu boda es un momento único, que te gustaría recordar toda tu vida como una experiencia positiva, rodeado de las personas que más quieres, haciendo que esta celebración sea especial. Para esto, desde hace un par de años, está en auge una profesión denominada Wedding planner que te ayudará en todo momento para tener la boda que siempre has soñado. Para que puedas saberlo todo de este concepto, te vamos a explicar para qué sirve y los consejos que debes seguir para elegirlo.
¿Para qué sirve un wedding planner?
Los wedding planner son personas que se encargan de todos los detalles de tu boda. Son personas dedicadas, muy detallistas y que pondrán al alcance de tu mano la celebración que siempre has querido tener. Cuando tienes una reunión con uno de estos profesionales, le explicas todo lo que deseas, si una boda en la playa o en el campo, la temática que quieres para tu celebración, o todos esos detalles que piensan que pueden ser necesarios para hacer de tu día, el mejor día de toda tu vida.
El problema que podemos encontrar en este sector es que a día de hoy no existe una titulación como tal que pueda certificar que una persona está cualificada para realizar esta tarea. Por este motivo, son importantes los siguientes consejos que te ayudarán a elegirlo sin que tengas problemas el día de la ceremonia.
Consejos para elegir tu wedding planner
Con estos consejos que te vamos a dar, estamos seguros que no vas a tener ningún tipo de problema a la hora de contratar a tu organizador de bodas.
Lo primero de todo que tienes que observar es que cuente con una amplia experiencia que puedas comprobar por medio de imágenes reales o de otros clientes. En ocasiones, podemos encontrarnos con ciertas personas que usan fotografías cogidas de internet de otros profesionales extranjeros para intentar decir que son suyas, por lo que conviene que puedas saber de primera mano si todo eso es real o se trata de un bulo. De igual manera, es importante conocer las experiencias que han tenido otros clientes y si estos te dicen que están muy satisfechos con el trato recibido, entonces será un gran paso para comenzar.
Es importante que el wedding planner que vayas a contratar te ayude a conseguir lo que tú quieres y no al contrario. Es tu boda y tienes que decorarla y crearla como a ti siempre te ha gustado. Hay muchos casos en los que esta persona lo que intentará será guiar tus pasos, pero hacia una dirección que sea mucho más sencilla para sus intereses, pero no llegarán en ningún momento a concordar con los tuyos. Esta sintonía y asesoramiento es esencial para la elección de un buen wedding planner, como también que te sientas cómodo hablando con él, que todo marche y sientas que están respondiendo a todos tus deseos.
Cabe destacar que es necesario un contrato o un requisito legal para realizar cualquier acción de este tipo. Si la persona que os organiza la boda no quiere daros un contrato o no está dada de alta, es posible que, en el caso de que la boda falle o no sea de tu agrado, no puedas por ningún medio conseguir una reclamación frente a nadie, puesto que no existe nada firmado, y te quedarás sin el dinero invertido en organizar tu boda, pero también con la decepción de que un día tan importante se ha ido al garete.
Una buena gestión del presupuesto es necesaria. No solo es importante que el coste de todo el trabajo sea económico, sino que sea de buena calidad en todos los aspectos. En la primera reunión deberéis de conocer el presupuesto del que contáis para vuestra boda, y por lo tanto, transmitírselo a vuestro wedding planner. Esta persona deberá deciros cuáles son los costes habituales en cada una de las actividades, ya sea el banquete, la celebración, el alquiler de un local o la decoración, todo esto deberá de ir muy bien desgranado para conocer cuáles son las alternativas, las partes más caras con el fin de poder ir modificando conforme vaya surgiendo cualquier impedimento.
Para finalizar, es aconsejable que un wedding planner solo tenga una boda por día y que asista a esta. Los imprevistos de última hora siempre pueden aparecer y si ha ocurrido algo y está organizando otra boda o incluso en otra ceremonia, posiblemente no pueda arreglarlo, por lo que te quedarás con dicho problema a no ser que alguien de la familia lo solucione. Que dicha persona esté allí contigo en ese día para supervisar que todo sigue adelante como es debido, es uno de los pasos más importantes, puesto que demostrará que, hasta no ver finalizado el día, no se sentirá satisfecho con el trabajo realizado.